Leyendas medievales

Desde las profundidades del medievo hasta nosotros

Expuestas en forma de romance, nos narran diferentes pasajes de hechos acaecidos en la vasta Extremadura a lo largo de los siglos y que la transmisión oral ha ido deformando, modificando o embelleciendo, según los casos, y que han sido recogidas y expuestas para conocimiento de las generaciones venideras.

De toros, toreros y torerías

Versos que se conjugan para contar cosas del Toro

La dimensión artística y humana de toreros o personajes de la Fiesta y diferentes y variados elementos que, sin ser los protagonistas directos van indisolublemente unidos a ella, son objeto de la inspiración y su resultado se plasma en esta colección que espero sea del agrado de los aficionados a los toros y a la poesía.

Cuentos

Una visión sencilla de las cosas con moralejas simples

¿Quién no se ha emocionado con un cuento? Mucho más si es un cuento contado, como debe ser, un cuento de los de antes, de los de hadas, en los que la imaginación del narrador se funde con la de quien escucha y el resultado es una personalísima interpretación de la historia.

El verso y la prosa son formas dce expresión de estos sencillos argumentos que pueden hacer pasar un buen rato a los niños y esbozar una sonrisa a los adultos.

Dedicatorias

Los que de alguna forma significaron algo

Lo cierto es que lo único que tienen en común estos poemas, o en su caso escritos, pues alguno de ellos va en prosa, es el hecho de ir dedicados a algo o a alguien.

Las formas, si bien predomina el romance, son variadas, incluso el dedicado a mi hermano Jorge está escrito en castúo, lo que imprime una cierta novedad al tema.

Religiosos

Versos que hacen sentir la presencia de Dios

Esa presencia de Dios y de su Divina Madre trascienden de sus representaciones que son el itinerario que sigue la piedad popular en esa auténtica cetequesis en la calle que son las Procesiones, que en el caso de la ciudad de Cáceres adquiere una dimensión especial al discurrir por las calles y plazas del recinto amurallado que, sin necesidad de alardes de imaginación, es fácil sentir como la propia Jerusalén revivida y que la cuesta del Adarve se haga verdadero Camino del Calvario.